Idilio antes de escapar [2do lugar en concurso arte joven, Neftalí Agrella]

Hacía muchísimo tiempo que no participaba de un concurso, mucho menos, en el ámbito del dibujo. A decir verdad, cuando mi mente comenzó a pensar en qué podría dibujar, teniendo el tema de ‘Mejillones’ (la ciudad donde vivo) se me cerraron muchas ideas que tenía en mi cabeza. Mas poco a poco, fueron apareciendo otras, que con el tiempo se transformaron en un lindo proyecto que aún no tiene nombre xD (soy pésima en darle nombres a mis creaciones u.u)

Fue así como nació ‘Idilio antes de escapar’, donde dibujé La Capitanía de puerto de mi ciudad, y en una esquina, una joven pareja, que al parecer, sienten algo similar a amor. Ni ellos mismos saben si se aman o no. Nadie lo sabe, todo es un idilio.

¿Escapar?

Pues sí, creo que ella escapa. Es bastante tímida, tiene miedo al fracaso, al qué dirán… prefiere vivir con pocas emociones que a sufrir con una inmensa, prefiere no sentir amor.

Mi dibujo iba acompañado de un texto, el cual, obviamente no ganó xd jajajaja los poemas no son lo mío y sí, ya lo entendí. El dibujo de paisajes tampoco me gusta, pero al parecer, los jueces encontraron que hice un buen trabajo. adjunto aquí la imagen de mi dibujo, y también, el poema (:

Alegoría al recuerdo.

Recordarle es dejar parte de mis pies marcados en la arena.

Pensarle es acompasarme con la brisa.

Añorarle es observar las avenidas y divagar en ellas.

Amarle y sentirle, es vivir en Mejillones.

Imaginarle siempre, descendiendo del tren,

Cantarle con angustia cuando desaparece en el desierto.

Bailarle el rocío cuando recogen las aguas.

Amarle y sentirle, es vivir en Mejillones.

Observarle cuando anochece,

Cuidarle cuando amanece.

Desearle que vuele lejos y no vuelva,

Es pedirle que me deje sola en Mejillones.

Porque él se marchó un día,

Y yo me quedé encendiendo los faroles.

Esperando a que viniese a apagarlos,

A que lo hiciera con ella, en Mejillones.

Porque se marchó para no volver.

Le dije que extendiese sus brazos,

Y sintiese como el aire le secaba las lágrimas al caer.

Él se lanzó y yo la muerte, le dejé morir en Mejillones.

Porque él tenía un amor que no podía olvidar.

Un amor que le dejó esperando, al igual que a mí.

Porque él ya no podía vivir sin su amor,

Acudió a mí, en Mejillones.

Y junto al recuerdo de ella también se fue,

Porque en Mejillones tuvo un amor,

Y no lo pudo olvidar.

Porque en Mejillones yo espero un amor,

Al que deseo también recordar.